Telecinco, Cuatro TV y Antena 3 ignoran las pautas del CAA para evitar juicios paralelos en el tratamiento del proceso por el caso Marta del Castillo

El Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA) ha constatado que Telecinco, Cuatro y Antena3 han ignorado las recomendaciones para el tratamiento mediático del juicio por el caso Marta del Castillo, aprobadas por esta autoridad reguladora el pasado 11 de octubre, al fomentar juicios paralelos en sus programas de entretenimiento mediante prácticas contrarias a la ética periodística y faltas de rigor informativo y que, en un caso, han vulnerado derechos fundamentales de una menor de edad envuelta en el proceso.

La elaboración de dicho informe obedece a las quejas ciudadanas recibidas en la Oficina de Defensa de la Audiencia (ODA) hasta el 7 de noviembre por este caso contra Telecinco, Antena 3 y Canal Sur. A día de hoy, el CAA ha recibido un total de 22 quejas. Ante los resultados de este seguimiento, el Pleno del CAA aprobó ayer una decisión en la que reitera a los medios de comunicación el contenido de las recomendaciones aprobadas hace ahora un mes y advierte de que sigue vigilando el tratamiento mediático de este juicio.

El Consejo ha analizado el seguimiento de la vista oral en 13 programas emitidos por Telecinco (dos emisiones de El Programa de Ana Rosa y uno de La Noria), Cuatro (dos emisiones de Las Mañanas de Cuatro), Antena 3 (dos emisiones de Espejo Público), Canal Sur (dos emisiones de Tiene Arreglo, una de Objetivo Abierto y otra de La Tarde Aquí y Ahora) y La1 de TVE (dos emisiones de Las Mañanas de La1).

La libertad de expresión no ampara infracciones a la deontología periodística
Así, y tomando como referencia las pautas recomendadas antes del inicio del juicio, se concluye que Telecinco, Antena 3 y Cuatro las han venido ignorando al emitir entrevistas con testigos y peritos llamados a declarar en la vista oral, lo que contribuye a la escenificación de un juicio mediático paralelo al que se desarrolla en la Audiencia Provincial de Sevilla. Telecinco, por ejemplo, anuncia que su “equipo de investigación” ha entrevistado a 57 testigos que serán interrogados en el proceso.

Se ha detectado asimismo la emisión de reconstrucciones de los hechos –en ocasiones sin advertir al espectador de que se trataba de una simulación- en las que además se mezclaban imágenes reales de los imputados con otras de actores de gran parecido físico. Los programas analizados han vulnerado derechos constitucionales de los encausados y han difundido como datos o información meros rumores y juicios de valor. Prácticas, todas ellas, que han sido denunciadas por los ciudadanos a la ODA.

Uno de los espacios incluidos en el informe es el programa La Noria, de Telecinco, en el que fue entrevistada la madre de uno de los jóvenes implicados en el caso con el propósito de que desvelase en el plató los hechos que, supuestamente, oculta al tribunal. Dicho espacio fue objeto de varias quejas por su contenido y por el hecho de que se pagara a la entrevistada. El CAA rechaza la apelación al derecho constitucional de libertad de expresión esgrimido por los responsables del programa para justificar comportamientos que infringen claramente la deontología periodística. De hecho, este caso ha motivado la intervención de la Fiscalía y el reproche social.

Vulneración del derecho a la intimidad de los menores en Antena3
El Consejo desea destacar asimismo la gravedad del tratamiento por parte del programa Espejo Público, de Antena 3, que el pasado 3 de noviembre emitió una imagen en la que se podía reconocer perfectamente a la mejor de edad, ex novia de uno de los imputados, que declaró como testigo. Dicha imagen fue acompañada de comentarios despectivos y especulaciones de los colaboradores del programa.

Por este motivo, el CAA advierte de que los menores están especialmente protegidos en nuestro ordenamiento jurídico. Y en el caso de las televisiones, la difusión de imágenes o datos que permitan la identificación de menores de edad en el contexto de hechos delictivos constituye una infracción muy grave que lleva aparejadas sanciones de hasta un millón de euros.

En su decisión, el CAA advierte del riesgo que entraña que programas concebidos para el entretenimiento asuman la función de informar, al tratarse de una tarea compleja que requiere profesionalidad y compromiso social, responsabilidad, rigor y honestidad. Cuando esto sucede, los magacines televisivos -recuerda el Consejo- no pueden prescindir de los elementos esenciales del periodismo.

Por último, el Consejo Audiovisual de Andalucía manifiesta su confianza en que los responsables de las cadenas televisivas y de estos programas reflexionen sobre la importancia que para el conjunto de la sociedad y, en especial, para nuestro sistema judicial tiene asegurar un contexto social y mediático que garantice la independencia e imparcialidad de los tribunales de Justicia y el respeto a los derechos fundamentales de todas las personas implicadas. Y estima necesario recordar que la libertad de expresión se asienta sobre el valor de la ética y el interés general de la sociedad.