Los nuevos servicios y retos normativos que plantea la televisión conectada, a debate en Málaga el 17 de octubre

A través de conferencias y mesas redondas, el próximo 17 de octubre se analizarán en el salón de actos del Rectorado de esa institución académica cuestiones como la evolución pendiente de la TDT, la aparición de nuevos formatos y servicios audiovisuales por medio de la televisión conectada –vídeos a demanda, televisión a la carta, OTT… -, así como el reto que supone la regulación de estos nuevos espacios en el marco de la Unión Europea.

Los andaluces usan dispositivos de comunicación cada vez más complejos y eficientes, entre los que figura la denominada televisión inteligente, ahora favorecida por un contexto de banda ancha. Las previsiones de los grandes fabricantes apuntan a que en 2015 el 90% de las televisiones vendidas en nuestro país tendrán conexión a la Red y alrededor del 70% de los hogares contarán con una smart tv.

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo publicó el pasado septiembre las condiciones técnicas que deberán cumplir los equipos y ofertas de televisión interactiva. El sistema HbbTV, que es por el que finalmente se ha optado, permite, pulsando una tecla del mando a distancia, que el consumidor tenga a su disposición todos los servicios de entretenimiento que las cadenas, proveedores de contenidos online y fabricantes pongan en circulación.

AEDETI (Asociación Española de Empresas de Televisión Interactiva) ha calificado este acuerdo como un paso decisivo para el desarrollo de la televisión interactiva en España, ya que posibilita el despegue definitivo de este ámbito del sector audiovisual a corto plazo.

En el marco de este proceso de cambios, la televisión sigue siendo el medio de comunicación de masas de mayor penetración en nuestro país y el preferido mayoritariamente para informarse o entretenerse, con lo que no ha perdido su protagonismo.

Se ve más televisión que nunca, y prueba de ello es que durante el pasado mes de septiembre se alcanzó el récord de consumo televisivo en este mes del año. Cada español estuvo 234 minutos ante el televisor, casi 4 horas al día. Además, Andalucía sigue siendo la comunidad donde más televisión se consume, con 253 minutos por espectador y día.

Todos estos aspectos han llevado al Consejo a impulsar una jornada sobre el futuro de la televisión, centrándose especialmente en cómo la llegada de la TDT, primero, y de la televisión conectada, después, conllevan importantes transformaciones en campos como los hábitos de consumo televisivo, la normativa audiovisual y la salvaguarda de los derechos ciudadanos.

El recorrido de la jornada
La jornada abordará el principal catalizador del cambio: Internet. Conoceremos algunos de sus aspectos más destacados y algunas opiniones muy extendidas sobre la Red que no terminan de ser ciertas. En palabras del ponente Andreu Veà, nos adentraremos en “todo lo que ya sabemos de Internet pero que nunca nos atrevimos a preguntar”.
Otra mesa redonda nos servirá para debatir  sobre los vacios normativos que presenta el nuevo panorama audiovisual y, por tanto, sobre el desafío que supone para los legisladores y las autoridades reguladoras el garantizar en estas condiciones los derechos básicos de la audiencia.

También se analizará la catarsis que vive el medio desde un enfoque regional, de forma que podamos saber cómo se experimentan estos cambios en los operadores autonómicos, para proseguir con otra mesa de debate en la que se pondrán de manifiesto las diferentes ópticas de quienes trabajan en el sector público y quienes lo hacen en la empresa privada.

Para la última conferencia contaremos con Eduardo García Matilla, quien nos ofrecerá su cualificada visión de hacia dónde viaja la televisión de nuestros días, apuntando cuáles son los elementos del modelo tradicional que quedarán atrás y qué tendencias se imponen ya en la potente oferta audiovisual que empezamos a disfrutar.

Un indudable interés formativo
Tras la multiplicación de la oferta, que ha dado lugar a la fragmentación de las audiencias, los jóvenes consumen una dieta mediática cada vez más amplia. Son particularmente vulnerables ante los contenidos que reciben y deben disponer de habilidades efectivas para establecer una relación de calidad con los medios.

Las ponencias y debates que tendrán lugar en esta jornada proporcionarán a los estudiantes –y al público asistente en general- una valiosa oportunidad de conocer mejor cómo es la televisión de hoy y cómo será la de mañana, y sobre todo les impulsará a reflexionar sobre cómo debe ser la televisión de una sociedad mejor y qué papel juegan ellos en esa progresión cualitativa.

La adquisición de habilidades tecnológicas, tan extendidas hoy día entre la población universitaria de nuestra comunidad, no garantiza la capacidad crítica, la creatividad o la autonomía personal, ni la cualificación para crear contenidos, relacionarse socialmente o participar en la vida pública. Hay un brecha digital, pero también exista una brecha cognitiva.

La educación en medios –esta jornada tiene una vertiente que atiende a ese objetivo- persigue convertir éstos en instrumentos de formación y no sólo de consumo. Asimismo, es una estrategia de inclusión democrática, ya que promueve una dimensión activa y participativa de los ciudadanos. Constituye, en fin, un instrumento esencial en la construcción de una democracia sostenible.