Iñaki Gabilondo defiende la solvencia y la ética en la profesión periodística ante las incertidumbres de la crisis y el nuevo modelo

El periodista Iñaki Gabilondo ha defendido la solvencia y la ética en la profesión periodística ante la crisis económica y el profundo cambio de modelo que atraviesa el sector de la comunicación, durante su conferencia "Periodismo: Lo que pasa y lo que queda", dentro del foro Diálogos en el CAA, que en esta nueva edición coincide con el décimo aniversario de creación del Consejo Audiovisual de Andalucía.

"Cuando hayan pasado 30 años y vivamos en un mundo que no concebimos todavía, va a quedar un oficio que hasta puede cambiar su nombre, pero es periodismo y tendrá sentido para la gente en la medida en que le ayude a entender el mundo y le ayude a cumplir su papel como ciudadano lleno de derechos", afirmó Gabilondo, que añadió que en el futuro, igual que ahora, el periodismo "tendrá que ser servido con decencia, que para mí es saber dejar muy claro si lo que dices lo sabes, lo crees o te gusta. Si esto que te digo es así y como es así, créetelo, o bien, esto que te digo no sé si es así, o me gustaría que fuera así".

La función del periodismo en la sociedad y el papel central de la deontología en el mismo han sido dos de las constantes de su conferencia. "Me moriré pensando que mi oficio tiene un compromiso público, me moriré pensando que mi profesión tiene sentido en relación con los otros y sirve para que los seres humanos puedan llevar a la práctica sus sueños y sus derechos", subrayó.

En este sentido, ha recalcó que "las travesuras que se han venido haciendo en el periodismo, en el nuevo tiempo tendrán posibilidad cero" y ha defendido la certificación de quien avala los hechos. La ética en el periodismo va a ser central, según el periodista, que ha admitido sentirse abrumado por la irrupción de las nuevas tecnologías de la comunicación y la multiplicación de las fuentes de información.

Ante este escenario, trazó un paralelismo: "Lo primero que escasea en las inundaciones es el agua potable. Lo primero que escasea en una inundación informativa es la información real. Las fuentes de agua potable son imprescindibles, es imprescindible distinguirlas". Gabilondo citó el caso WikiLeaks, donde se ofrecía a la sociedad una cantidad ingente de datos e información que, sin embargo, requirió de periódicos que filtraran, jerarquizaran e interpretaran dicha información para poder trasladarla en toda su trascendencia a la audiencia. Lo que sí es seguro -dijo- es que en esa corriente, la búsqueda de yacimientos de agua potable informativa, tendrán que ser identificadas mediante la solvencia, que es credibilidad que, a su vez, es decencia sumada a tiempo.

Ante este nuevo modelo de comunicación global, vertiginoso y abundante, Gabilondo defendió la selección de fuentes informativas por parte del ciudadano y recordó que esta abundancia conlleva también la aparición de formatos informativos de gran calidad. De manera que animó a desterrar la visión fatalista que "nos están imponiendo desde cierto pensamiento político" relativa a conformarnos con la situación actual de precariedad laboral y pérdida de calidad en los niveles de vida.

"Me fastidia mucho un pensamiento político que se impone, y que nos dicta que esto  ha venido para quedarse. Y no es verdad. Este pensamiento que ha construido un mundo que nos dice que no hay alternativa y nos obliga a aceptar la vida del precariado. Lo que está pasando ahora, está pasando y lo que viene detrás, no está escrito, es mentira que esté escrito. Dependerá de lo que hagáis, de lo que no hagáis y de lo que permitáis que se haga", enfatizó Gabilondo en una conferencia marcada por la presencia de un numeroso grupo de estudiantes de periodismo a quienes interpeló.

Diez años del Consejo Audiovisual de Andalucía

La conferencia de Gabilondo en esta edición de Diálogos en el CAA se enmarca además en el X aniversario de la creación del Consejo Audiovisual de Andalucía, tal y como recordó la presidenta del órgano, Emelina Fernández, durante la presentación del periodista. Diez años en los que el trabajo del CAA ha logrado retirar la pornografía de las pantallas de televisión, perseguir las emisiones de videncia en horario protegido o defender la igualdad de género en los contenidos audiovisuales.

Otras de las líneas de trabajo constantes del CAA en estos años ha sido la vigilancia del cumplimiento del pluralismo político en la información y la lucha contra la publicidad ilícita, entre otras cuestiones. Gabilondo, por su parte, defendió la existencia de los consejos audiovisuales frente a "la campaña de desprestigio hacia estos órganos orquestada por un grupo de españoles que cuajó", dijo, en contra de lo que es habitual en el resto de países de nuestro entorno.