Antonio Checa reclama en el Parlamento “una acción decidida” de los poderes públicos contra la piratería audiovisual

El presidente del Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA), Antonio Checa, ha afirmado que es imprescindible “una acción decidida” de los poderes públicos contra la piratería audiovisual, “y que el propio Parlamento tome también conciencia del problema”. En la presentación del Informe Anual 2019 ante la Comisión de Presidencia, Administración Pública e Interior, Checa se ha referido igualmente a la falta de avances significativos en el pluralismo político de las televisiones locales y destacado que la defensa de los menores en el entorno digital y la atención a los problemas específicos de las minorías han sido tareas prioritarias de esta institución durante el pasado año.

Antonio Checa ha señalado que desde su creación el Consejo viene advirtiendo sobre la persistencia en la comunidad autónoma de altos niveles de piratería audiovisual, tanto en la radio como en la televisión, “con muchas emisiones ilegales que prolongan su actividad en el tiempo y, entre otras consecuencias, destrozan la libre competencia y debilitan el sector”.

En este sentido, el Informe Anual revela que más de la mitad (54%) de las alertas o infracciones detectadas por el CAA durante 2019 procedían de canales sin licencia: publicidad de productos milagros, videncia en horario no permitido y contenidos pornográficos asociados a servicios telefónicos.

El Consejo localizó 64 frecuencias ocupadas ilegalmente por canales de televisión en 2019, una cifra inferior a la de años anteriores (85 en 2018 y 112 en 2017) pero aún preocupante para este organismo, que lo considera una grave amenaza para un sector integrado por pequeñas empresas sujetas a un marco legal estricto y porque, además, representa un riesgo para la población vulnerable, como los menores.

Por otro lado, el presidente del CAA ha lamentado que no se hayan producido avances “continuados y significativos” en el ámbito del pluralismo político, fundamentalmente entre las televisiones locales públicas. De hecho, el principal tema de las quejas recibidas a través de la Oficina de Defensa de la Audiencia es el pluralismo, imparcialidad y veracidad, seguido por los contenidos discriminatorios u ofensivos para colectivos y la igualdad y género.

Nueva etapa en el CAA

Tras la renovación de la composición del Consejo en julio de 2019, con la reducción de sus miembros de once a nueve consejeros, Antonio Checa ha explicado que se ha iniciado una nueva etapa en la que se mantienen las tareas encomendadas por ley a la entidad, como la protección e impulso del pluralismo político, la defensa de la igualdad o la protección de los menores en el ámbito audiovisual, pero también “se han introducido ya las primeras iniciativas y frutos de la renovación, con nuevas inquietudes y nuevas actuaciones”. Y todo ello además, ha subrayado el presidente, “con un compromiso de transparencia sobre su organización y funcionamiento”.

La salvaguarda de los más jóvenes se ha convertido en uno de los quehaceres preferentes para el CAA, y en esta línea se enmarca la celebración de unas jornadas específicas en el Parlamento, con gran éxito de asistentes y posterior publicación de las conferencias (Cuadernos del Audiovisual nº 9), y el mantenimiento –con ampliación a todos los centros educativos, no sólo los públicos y concertados- de los Premios Andaluces El Audiovisual en la Escuela, a los que pese a las limitaciones impuestas por la lucha contra la pandemia se han presentado 38 trabajos, cifra superior a la media de ediciones anteriores.

El presidente ha destacado igualmente el trabajo desarrollado por el CAA para “dar respuesta a la preocupación de la sociedad andaluza por el tratamiento sensacionalista, con escaso respeto al derecho a la intimidad y a la propia imagen de los menores y su familia”, en casos de fuerte impacto mediático como la muerte de los niños Gabriel Cruz en Almería y Julen Roselló en Málaga. El Consejo elaboró sendos informes sobre el seguimiento de los tratamientos informativos y, en el caso del juicio por el pequeño Gabriel, se promovió con notable repercusión social un pacto ético entre asociaciones profesionales, medios de comunicación y otras entidades para frenar las malas prácticas periodísticas.

Asimismo, y a través del Barómetro Audiovisual de Andalucía, este organismo se ha hecho eco de las opiniones y expectativas de la población andaluza, como su preocupación ante el incremento de la publicidad sobre los juegos de azar, orientada en gran medida a los jóvenes, sus quejas ante el exceso de publicidad en la televisión y la abundancia de los llamados programas del corazón o su valoración sobre que ésta sea el medio menos imparcial y plural.

Respecto a este estudio demoscópico y al Estudio de Pluralismo Político, Checa ha indicado que el CAA quiere mantener y ampliar estos informes, “perfilando mejor, por ejemplo, conceptos como los de pluralismo en el ámbito audiovisual e incluyendo nuevas inquietudes de la sociedad andaluza en las encuestas que configuran el Barómetro Audiovisual”.

Informes emitidos

A lo largo de 2019 el CAA ha emitido 37 informes, entre los que cabe mencionar el análisis anual sobre la distribución por sexo del tiempo de palabra en los informativos, que ha puesto de manifiesto una vez más la diferencia entre hombres y mujeres en las intervenciones que en 2018, año objeto del estudio recogido en la memoria, fue de 28,6 puntos. Otros informes se han centrado en la presencia de la violencia de género en los telenoticiarios, que ocupa el tercer puesto en importancia entre los asuntos de actualidad, sólo superado por la inmigración y las elecciones, en número o duración de las noticias, y en la representación de las personas mayores en la publicidad.

Asimismo, el presidente ha hecho hincapié en que en 2019 se ha dedicado atención especial a los problemas específicos de las minorías, con la difusión por ejemplo de recomendaciones sobre el tratamiento informativo de las personas con discapacidad y la celebración de una jornada, organizada por Plena Inclusión Andalucía, sobre discapacidad y medios de comunicación.

Igualmente, el mal uso del idioma ha sido otra de las áreas de actuación del CAA y se ha tratado de fomentar así su correcta utilización entre los profesionales, a la vez que se ha abogado por la normalización del habla andaluza en los medios de comunicación de la comunidad.

Colaboración con otras instituciones

En su intervención parlamentaria, Antonio Checa ha resaltado que desde el inicio de esta nueva etapa del CAA se ha impulsado una labor de conocimiento de las aspiraciones y problema del sector audiovisual, integrado por cerca de 625 empresas en toda la comunidad, a través de reuniones y contactos asiduos con sus representantes “porque ese mejor conocimiento debe contribuir también a un  mejor cumplimiento de los objetivos y responsabilidades del Consejo”.

El CAA ha comenzado también este año una línea de colaboración con el cine andaluz en sus diversas facetas, desde la presencia de la institución en festivales como los de Sevilla y Huelva a contactos con asociaciones y sectores profesionales, “colaboración que debe continuar y ampliarse a lo largo de los próximos meses”, según ha afirmado Checa.

Para la consecución de muchos de los nuevos objetivos y aspiraciones del Consejo, Antonio Checa ha señalado que es conveniente la colaboración con otras instituciones y para ello se han suscrito convenios con la Universidad de Cádiz y se trabaja en otros con el Defensor del Pueblo Andaluz, en su calidad también de Defensor del Pueblo Andaluz, la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) o Autocontrol, el organismo español de autorregulación publicitaria, a la vez que se han mantenido relaciones con otros consejos europeos e iberoamericanos para conocer sus iniciativas  y contrastar opiniones.

Nuevas competencias

El presidente ha aprovechado también su comparecencia parlamentaria para informar de que el CAA trabaja ya sobre la incidencia que la Covid-19 está teniendo en el sector, con el uso intensivo de los medios audiovisuales por el confinamiento y la multiplicación de falsas noticias. Muchos de estos bulos circulan además por las redes sociales, y parte de ellos son generados dentro de la propia comunidad autónoma, por lo que Checa ha dicho que se abre el debate sobre si estas nuevas exigencias requieren de nuevas competencias para el Consejo.

En todo caso, el presidente ha defendido la utilidad de la institución como herramienta indispensable en la sociedad actual. “La creciente complejidad del mundo audiovisual y los desarrollos que se vislumbran, la inmediatez y amplitud con que circula todo tipo de información o contenidos en los medios, y la influencia que ejercen, hacen necesarios órganos como los consejos audiovisuales”, ha afirmado el presidente.

Además, Checa ha recordado que el desarrollo de la Ley Audiovisual de Andalucía y la aplicación a la normativa española de de la nueva directiva europea sobre Servicios de Comunicación Audiovisual tendrá una notoria incidencia en el ámbito audiovisual andaluz en este año 2020, y sobre algunos aspectos de estos cambios ha empezado a ocuparse ya el Consejo, como la salvaguarda de los jóvenes frente a la violencia, las incitaciones al odio o la desinformación, la búsqueda de una mayor protección de sus datos personales o las limitaciones a la publicidad en horario de programación infantil.

Cuando se cumplen quince años de la creación del CAA, su presidente ha aseverado que en estos tres lustros de existencia la institución “ha luchado por hacer más transparente el mundo audiovisual andaluz”, y aunque “queda mucho por hacer y no faltan nuevas exigencias”, la comunidad tiene en el Consejo “un instrumento que entre todos debemos mejorar, pero que en las sociedades de hoy resulta imprescindible”.