Las televisiones andaluzas han corregido la negativa tendencia detectada por el Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA) respecto a la pérdida de relevancia informativa de la violencia de género en los informativos de 2012. En el último informe, correspondiente a las emisiones de 2013, el Consejo ha constatado que las informaciones relacionadas con la violencia de género en las televisiones públicas analizadas han aumentado un 71% respecto al ejercicio anterior, hasta representar un el 1,3% de promedio de las informaciones difundidas, y que este incremento no está vinculado a noticias sobre agresiones o asesinatos de mujeres.
Así, un tercio de las noticias relacionadas con la violencia hacia la mujer dieron cuenta de agresiones o crímenes, mientras que el resto relataron cuestiones relativas a información y sensibilización social. No obstante, existen diferencias entre los operadores analizados, al constatarse un retroceso en algunos indicadores mostrados por los informativos de la desconexión andaluza de TVE, donde el 61% de las informaciones relataron acciones violentas, frente al 48% registrado en 2012.
Para la realización de este informe cuantitativo, el CAA ha catalogado los informativos diarios de Canal Sur Televisión, sus ocho desconexiones provinciales, los informativos diarios de la desconexión andaluza de TVE, y los noticiarios de diez televisiones municipales (Fuengirola, Estepona, Málaga, Granada, Huelva, Cádiz, Jaén, Jerez, Motril y Almería). En total, 3.225 horas de informativos, con 140.210 noticias.
Además del informe, el Consejo ha aprobado una decisión en la que valora positivamente el esfuerzo de los operadores de televisión públicos por visibilizar y denunciar la violencia de género, si bien, insiste –entre otras cuestiones- en la necesidad de que aumenten las voces masculinas en estas informaciones, donde la presencia femenina es abrumadora pese a que se han registrado mejoras: se ha pasado de un 25% de testimonios masculinos a un 34% en 2013. Este desequilibrio traslada la idea de que la violencia de género es un problema de las mujeres.
Otra de las cuestiones sobre las que vuelve a llamar la atención el CAA en su decisión es la necesidad de que los medios de comunicación acudan con más frecuencia a personas expertas para contextualizar este tipo de informaciones. Se ha pasado de un 6,19% en 2012, a un 9,53%, una cifra baja que no obstante, duplica al ratio registrado en el resto de informaciones, donde el promedio es del 5,3%. En este caso, también se han registrado grandes diferencias entre los operadores analizados: En algunas televisiones municipales representan el 4%, en La1 el 8,33% y en Canal Sur el 15,17%. En este sentido, el Consejo recuerda que los códigos de autorregulación recomiendan a los medios de comunicación acudir a personas expertas y no utilizar testimonios del entorno de la víctima que, con carácter general, no aportan información concreta sino opiniones circunstanciales sobre las relaciones de la pareja y de las personas implicadas en la información.
Vecinos y allegados de las víctimas en las noticias
Sobre este aspecto también se ha experimentado un avance positivo en la presencia de actores ocasionales, que es la denominación que define a los testimonios a cámara personas sin identificar que intervienen en la noticia (vecinos, parientes o conocidos de las personas implicadas). Se da la circunstancia de que en el resto de informaciones, la presencia de actores ocasionales representa un promedio del 13% de los testimonios emitidos, mientras que en las noticias sobre violencia de género este porcentaje se sitúa en el 18%.
Aunque siguen teniendo un peso relevante, su presencia ha disminuido en la RTVA (del 31,5% en 2012 al 17% en 2013), también en las televisiones municipales (del 12,6% de promedio en 2012 al 8% en 2013). No ha ocurrido lo mismo en La1 de TVE para Andalucía, donde han aumentado casi diez puntos porcentuales desde 2012: del 25,4% ha pasado al 34,5% en 2013.
Otro de los rangos analizados para este informe es el peso de estas informaciones en los informativos. Durante 2013, el 32% de las noticias sobre violencia de género emitidas volvieron a abrir los informativos como primera, segunda o tercera noticia, lo que supone un avance de cinco puntos respecto al informe del ejercicio anterior, donde se constató una pérdida de relevancia y pulso informativo. Asimismo, se ha comprobado que el 63% de las noticias sobre agresiones o asesinatos por violencia de género abrió los informativos, lo que implica una mayor sensibilización por parte de los medios al valorar la violencia machista como un asunto de interés social.
Este tipo de noticias son un 22% más breves que el promedio del resto de noticias, y un 42% más cortas si se comparan con noticias de otro tipo de sucesos. El CAA interpreta la brevedad de estas noticias como un síntoma del esfuerzo de los medios por asumir las recomendaciones encaminadas a proteger a las víctimas y eliminar inercias y prácticas que fomentan el sensacionalismo y el morbo.
Sin embargo, este esfuerzo, sostiene el Consejo en su decisión, no debería conducir necesariamente a una presentación de los crímenes desnuda de la función social y pedagógica que se espera de los medios. En este sentido, recuerda el CAA que la violencia de género debe presentarse siempre como un proceso progresivo que discurre desde el insulto y un primer golpe hasta el homicidio o asesinato. Esto no significa que todos los casos recorran el mismo camino, pero sí que todos los que llegan a una agresión grave lo han recorrido.
A la luz de estos datos, el Consejo Audiovisual de Andalucía ha reiterado la necesidad de revisar el Código de Autorregulación de Contenidos, algo que viene haciendo desde el año 2008, para adecuarlo a los cambios legislativos ocurridos desde entonces con la entrada en vigor de la Ley de Igualdad, la Ley contra la Violencia de Género, y la Ley General de Comunicación Audiovisual.
La responsabilidad de los medios y de la industria publicitaria
Asimismo, asume las conclusiones del grupo de trabajo creado por el CAA para analizar el tratamiento mediático de la violencia de género, entre las que destacan la necesidad de que la violencia de género sea un asunto a abordar de forma transversal en diversos tipos de programas, la conveniencia de abandonar el tratamiento de las agresiones y asesinatos de las mujeres como hechos aislados sino como un proceso complejo que hunde sus raíces en la transmisión de modelos de conducta sexistas y discriminatorios, así como en la cosificación de la imagen de la mujer. Aspecto en el que medios de comunicación e industria publicitaria tienen una gran responsabilidad.
Este grupo de trabajo ha trasladado asimismo su preocupación por la influencia en los menores de los modelos de conducta que están transmitiendo los medios de comunicación en algunos de sus programas de entretenimiento, en las series y películas que emiten. Reclama además mayor presencia de personas expertas en la materia en la televisión y la emisión y difusión de casos de mujeres que han superado con éxito situaciones de violencia de género.